Érase una vez un país muy triste y lejano. Un señor era la sombra oscura y por eso el país era triste y aburrido.
Un día vino un señor que escondía un secreto que hacía que los países fueran bonitos, se trataba de la piedra de la fantasía. Con ella tu deseabas algo y se te concedía, por ejemplo que tu país fuera estupendo.
Un día se encontraron los dos hombres y ambos sabían el secreto del otro. Al día siguiente, tuvieron una disputa de la que salió victorioso el hombre de la piedra mágica. Finalmente, el país triste y lejano se convirtió en el país mas grande y bonito del mundo.
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